Se estima que cada año terminan en los océanos ocho millones de toneladas de residuos plásticos.
Al ritmo de consumo actual de aquí a diez años los mares y océanos de nuestro planeta contendrán una tonelada de plásticos por cada 3 toneladas de peces y, en 2050, el peso de los residuos plásticos será superior al peso de todos los peces del planeta. Estos son los datos que se publican en el estudio La nueva economía de los plásticos, presentado esta semana en elForo Económico Mundial que se celebra en Davos (Suiza). En este foro económico por excelencia se ha abordado estos días la reforma del sector financiero, la economía de China, la crisis de los refugiados y la omnipresente caída del precio del petróleo, pero también la contaminación que sufren nuestros mares.
Se calcula que cada año terminan en los océanos del mundo ocho millones de toneladas de residuos plásticos, aunque esta cifra podría aumentar diez veces en la próxima década a menos que la comunidad internacional mejore sus prácticas de gestión de residuos. Esta cantidad podría cubrir 34 veces el área de la isla de Manhattan. O más gráficamente: esta cifra equivale a verter al agua del mar cada minuto la carga de un camión de gran tonelaje. Estas cifras proceden de un estudio que publicó la revista «Science» el año pasado y que por primera vez calculó la cantidad de desechos plásticos que llegan al mar cada año desde tierra. «Si no se toman medidas -advierten desde Davos-, los vertidos serán equivalentes a dos camiones por minuto en 2030 y cuatro camiones por minuto para el año 2050».
El estudio presentado en Davos -que forma parte del proyecto MainStream, una iniciativa del Foro Económico Mundial que cuenta con el apoyo de la Fundación Ellen MacArthur- utiliza estas cifras, las proyecta y las compara con la biomasa de peces en los océanos no para criticar a la industria de los plásticos sino para llamar la atención sobre los puntos débiles del sistema de producción, consumo y reciclaje y la búsqueda de soluciones a través de la incipiente economía circular, esto es, que nuestros residuos vuelvan como recursos al ciclo productivo.
La cita de estos días en Davos se centra en la llamada cuarta Revolución Industrial, por lo que la idea es ver cómo podemos convertir los desafíos de la actual economía de plásticos en una oportunidad global para la innovación.
Más reciclaje
Debemos pasar del usar y tirar a la reutilización o a buscar nuevos materiales que hagan la misma función pero que no requieran tanto consumo de petróleo y que sean biodegradables. El informe señala que la mayoría de los envases de plástico se utiliza una sola vez. «El sistema actual de producción, utilización y abandono de los plásticos tiene efectos negativos importantes: entre 80.000 y 120.000 millones de dólares se pierden cada año en forma de envoltorios plásticos que no son reutilizados». Y aboga por «repensar totalmente el sistema de embalaje» y la búsqueda de alternativas al petróleo como material de base para su producción.
El uso de plásticos ha aumentado veinte veces en el último medio siglo y se espera que se duplique de nuevo en los próximos 20 años. Esto llevará a que en 2050 la industria del plástico consumirá el 20% de la producción total de petróleo y el 15% del presupuesto anual de carbono.
El informe recomienda la implantación de sistemas de recogida selectiva y reciclaje -en España es el contenedor amarillo gestionado por Ecoembes y que además de envases plásticos recoge también los de papel y cartón y las latas y briks- en todos aquellos lugares donde no existen, pero sobre todo en los países que han sido identificados como los mayores contaminadores.China es el primero, y le siguen Indonesia, Filipinas, Vietnam y Sri Lanka. Entre los cinco acumulan el 83 por ciento de los residuos de plástico mal gestionados que podrían acabar en el océano. Y por eso los investigadores calculan que la reducción de estos residuos en un 50% se traduciría en una disminución de casi el 40% de las entradas de plástico en el océano. En esta lista de contaminadores del mar EE.UU, se sitúa en el número 20, mientras que la UE en su conjunto se queda en el número 18. En España, de acuerdo con los últimos datos de Ecoembes, se reciclan casi 3 de cada 4 envases de plástico, pero fuera de Europa es muy raro encontrar tasas de reciclaje así. En Estados Unidos, por ejemplo, donde su consumo se multiplicó por 30 entre 1960 y 2007, la tasa de reciclaje, sin embargo, apenas se multiplicó por dos.
Pero más allá de esto se hace necesario buscar alternativas al petróleo en su producción. En España ya hay empresas que incorporan materia prima reciclada en los envases. Así, una empresa de aguas sacó en 2012 su botella de 1,5 litros con un 20% de material reciclado, mientras que otra ha empezado a utilizar en sus garrafas un material procedente de la caña de azúcar.