A muchos quizás nos de vergüenza hablar de los problemas de las hemorroides. Sin embargo, es bueno saber que este es un problema más común de lo que creemos. Se trata de una hinchazón de las venas en el área del recto y el ano. En casos donde se encuentre en etapa avanzada, los médicos recomiendan la operación.
No obstante, te animamos a evitar operarte. Con el tratamiento que te presentaremos a continuación podrás curarte de manera natural y efectiva. Tras leer este artículo, compruébalo tú mismo, así evitaras la fastidiosa y peligrosa operación de las hemorroides.
De manera más detallada, podemos definir las hemorroides como la dilatación de las venas hemorroidales. Estas venas se agrandan provocando una inflamación más parecida a un nudo. La mayoría de veces, esa leve hinchazón no puede ser vista ni palpada por los médicos. Pero en el peor de los casos, esa inflamación sobresale del canal anal.
Esta enfermedad afecta a nada menos que el 50% de la población mundial mayor a los 30 años. Sin embargo, también se han conocido casos de jóvenes que están padeciendo de dicha enfermedad.
Rara vez las hemorroides son de gran tamaño, lo que causa una gran molestia. En estos casos, los médicos tienden a recurrir a la operación como el medio más confiable para resolverlo. No obstante,estas operaciones son bastante peligrosas. Además, en ella se pueden formar coágulos de sangre en las piernas, lo que puede resultar en un grave problema de salud aparte de ser muy doloroso.
Otro de los grandes problemas que puede causar esta operación es la estenosis anal, que es el estrechamiento del canal del ano, lo que dificulta el acto de defecar. Entre las molestias que causan las hemorroides, podemos mencionar:
Dolor
Ardor
Sangrado no doloroso en la zona anal
Secreción de moco proveniente del área anal.
Picor
Prolapso (cuando las hemorroides salen del ano, esto solo sucede en casos graves)
Las hemorroides pueden tener distintas causas, entre las más conocidas podemos mencionar el estreñimiento, el sobre peso, sobre esfuerzo en el acto de la defecación, patologías hereditarias, ingesta de alimentos de difícil digestión y rara vez, los embarazos.
La mejor manera de combatir esta enfermedad es con una alimentación balanceada y rica en fibra, acompañada de ejercicios diarios. A continuación, te diremos lo que puedes hacer en tu propia casa para que combatas esta enfermedad.
Qué necesitaras:
1 penca de sábila (aloe vera).
Papel aluminio
Preparación y uso:
Quita la cascara a la sábila, quedándote solamente con el cristal de aloe vera. Lo cortas en pedazos pequeños, formando una clase de supositorios. Los envuelves en papel aluminio y lo entras al congelador.
Antes de dormir, con los supositorios de aloe vera ya congelados, deberás introducirlos en el recto. Pero antes, deberás remover el papel aluminio del cristal de sábila. Practica este tratamiento inter diario y veras como el dolor y las molestias van desapareciendo.
Si crees que este método es efectivo, no olvides compartirlo con tus amigos y familiares para que ellos también puedan combatir este vergonzoso problema de salud o ayudar a quienes están padeciendo de él.