La inhibición de la enzima FASN, de por sí reducida en los pacientes con sobrepeso u obesidad, podría mejorar el pronóstico en el ccRCC.
Las personas que padecen obesidad, esto es, que tienen un índice de masa corporal (IMC) igual o superior a 30 kg/m2, presentan un riesgo significativamente de desarrollo de diversos tipos de cáncer. Es el caso del carcinoma de células renal de tipo células claras –o ccRCC según las siglas en inglés–, tipo de tumor que constituye hasta el 80% del total de casos de neoplasias primarias en el riñón. Sin embargo, y como confirma de forma más que sorprendente un estudio dirigido por investigadores del Instituto Oncológico Dana-Farber en Boston (EE.UU.), las personas que padecen este tipo de cáncer, y muy especialmente en las formas avanzadas o ‘metastásicas’, tienen una esperanza de vida significativamente superior en caso de ser obesas.
Como indica Toni K. Choueiri, director de esta investigación publicada en la revista «Journal of Clinical Oncology», «los resultados de los estudios previos ya habían mostrado que el cáncer renal tiene unas características menos peligrosas cuando es diagnosticado en pacientes con obesidad. Y asimismo, que cuando estos pacientes obesos son tratados con terapias dirigidas presentan una mejor supervivencia global. También en aquellos casos en los que la enfermedad ya se ha diseminado por el organismo».
Cuestión de peso
Para llevar a cabo el estudio, los autores analizaron los registros del Consorcio Internacional de Base de Datos del Carcinoma Renal Metastásico’ (IMDC), en el que figuran los historiales médicos de 1.975 pacientes diagnosticados del tumor y tratados con inmunoterapia. Y de acuerdo con los resultados, la mediana de supervivencia de los pacientes con obesidad o sobrepeso resultó notablemente superior a la de aquellos con un IMC ‘normal’: 25,6 meses frente a 17,1 meses. Es decir, el exceso de peso se asoció con una reducción del 16% de la tasa de mortalidad.
Es más; los investigadores también evaluaron los datos de una ‘cohorte de validación’ conformada por un total de 4.657 pacientes con ccRCC participantes en distintos ensayos clínicos desarrollados entre 2003 y 2013. Y nuevamente, la supervivencia media global fue significativamente mayor en los pacientes con exceso de peso –23,4 meses, por solo 14,5 meses en el caso de un IMC inferior a 25 kg/m2.
Y este menor riesgo de mortalidad asociado a la obesidad, ¿a qué obedece? O dicho de otro modo, ¿por qué los tumores de los pacientes obesos son menos agresivos y responden mejor a los tratamientos? No en vano, la obesidad conlleva un riesgo mucho mayor de desarrollar este tipo de cáncer. Pues para averiguarlo, los autores recurrieron a dos nuevas bases de datos –el ‘Atlas del Genoma del Cáncer’, proyecto que incluye información clínica y genética de 324 pacientes con ccRCC; y un registro del propio Instituto con muestras de tejido tumoral de 146 pacientes– con el objetivo de identificar las posibles diferencias moleculares existentes entre los tumores de los pacientes con exceso de peso y de aquellos con un IMC normal.
Los resultados del análisis de los datos del ‘Atlas del Genoma del Cáncer’ no mostraron que hubiera ninguna mutación genética específica para los tumores de los pacientes obesos o de los pacientes con normopeso. Sin embargo, el análisis de la expresión genética reveló que los pacientes con exceso de peso tenían una expresión mucho menor de una enzima, la ácido graso sintasa (FASN), que juega un papel clave en la lipogénesis –esto es, la síntesis de ácidos grasos por las células.
¿Nueva diana terapéutica?
Numerosos estudios han constatado la sobreexpresión de la enzima FASN en diversos tipos de cáncer. Tal es así que el gen que codifica la enzima –el gen ‘FASN’–, está considerado un oncogén metabólico. Y es que la presencia de FASN se asocia con una mayor mortalidad en numerosos tipos de tumores, incluidos los renales.
En definitiva, la expresión de FASN, si bien aún se desconoce el por qué, se encuentra reducida los pacientes con exceso de peso que han desarrollado ccRCC, lo que podría explicar que presenten mejores tasas de supervivencia que aquellos con un peso normal.
Como concluyen los autores, «nuestros resultados ofrecen una base racional para el desarrollo de estudios dirigidos a inhibir la expresión de FASN en pacientes con cáncer renal con el objetivo de mejorar su pronóstico. Y es que los inhibidores esta enzima, incluidos algunos derivados de productos naturales, han sido objeto de investigación durante muchos años y están considerados un enfoque prometedor para el tratamiento del cáncer».